EL CONTROL DE LOS MEDIOS

La noticia de actualidad es el intento de de los partidos políticos de hacerse con el control de los medios de comunicación. Hablo del caso de RTVE. Unos dicen que hay un intento de bloqueo de las negociaciones en la Dirección y otros que es un intento de “acabar con la pluralidad de la información pública”.

¿Quién tiene razón? ¿Por qué esta lucha por el control? ¿Es algo nuevo?

Si partimos de la base de que los medios de comunicación se basan en la obtención de financiación por parte de decisiones políticas o a través de entes privados (publicidad, sponsors…), podemos concluir que la objetividad es una quimera. Si añadimos el factor “lobby” o la consolidación de los medios en manos de un grupo reducido de personas, la conclusión a la que podemos llegar es que la ideología va a imperar a la hora de proporcionar información a los ciudadanos.

Hay varios ejemplos de grupos de comunicación/presión que ejercen o “imponen” su ideología o sus dogmas a la hora de decidir sobre qué informar o qué ocultar. No quiero abordar o entrar de lleno en estos ejemplos porque no terminaríamos nunca.

La lucha por el control de los medios no es nada nuevo. Siempre ha sido así. El que tiene los medios, el que forma las opiniones, tiene el poder. Las decisiones que se toman en la esfera política pueden ser malas o buenas dependiendo de la óptica con la que nos las enfoquen.

Pero aparte de los medios de la prensa, la radio y la televisión, el fenómeno “nuevo” (no lo es tanto, ¿no?) se llama Internet. Un medio de comunicación y de información “bidireccional” en el que las personas opinamos, exponemos un criterio, damos nuestras opiniones…frente al carácter unidireccional de los primeros: a través de ellos, la comunicación fluye en un solo sentido, sin réplica, rígidamente…

Es este carácter flexible, bidireccional y libre el que más está inquietando a las personas que hasta ahora ostentaban el poder de decisión de qué es noticia, qué no es y qué conviene ocultar a la opinión pública. El fenómeno de las redes sociales es notorio. Ha condicionado y está condicionando muchas de las decisiones. Está calando en la política. Lo que antes sólo podían hacer los ciudadanos mediante el voto, ahora está siendo posible gracias a la presión de sus opiniones, de sus manifestaciones y de sus acusaciones.

Por eso, creo que en una sociedad creciente, globalizada, culta e inquieta, el control de los medios tradicionales de comunicación de masas, está llegando a su obsolescencia.

Hoy en día, el mundo se dirige a través de la RED. Y ya empiezan a manifestarse desde ciertos ámbitos políticos, económicos y sociales acerca de lo que es el “control de la red”, el “ataque a la neutralidad de la red”. Véase ACTA, por ejemplo en USA. Véase los intentos en España de la “Ley Sinde”, tapadera de un control creciente de Internet con la excusa o coartada de los derechos de autor.

Y en esta guerra estamos inmersos ¿Se llegará a controlar Internet algún día? Dejo esta cuestión en el aire.