martes, marzo 18, 2014

MONÓLOGO: "COMITÉ DE EXPERTOS"

En los tiempos que corren está muy de moda formar un Comité, Convite o Reunión de Parroquianos Afines. 

En España estamos a la vanguardia. Tenemos materia prima para ello: gente que sabe de todo, bares y, sobre todo, mucho alcohol.

-Señor ministro, tenemos que adoptar medidas excesivamente impopulares para reformar el Código Penal, ¿qué hacemos?

-¿Te acuerdas de Paco “el Tuerto”, Pepe el que vino a mi boda y esos dos hermanos con bigote que se parecen a José María Aznar después de beberse hasta el agua de los floreros?

-Sí, señor ministro. Pero Paco está en la cárcel por prevaricar dos veces. A los cohechos me remito…

-¿Está en el trullo?

-Sí.

-Pues le indultamos, coño! Que estamos en España! Cuando le quiten el traje de rayas, dile a Paco Camps que le busque un traje de esos de oferta y que se peine. Al menos que parezca creíble cuando presentemos el Informe que ya tenemos redactado. Está debajo de la flamenca que está encima de la tele, luego lo buscas.

El pionero en esta idea tan Brillante como el arroz que venden en Fukushima no podía ser otro que el expresidente Zapatero cuando reclutó a un grupo de jubiletas en Benidorm para constituir el llamado “Comité de Sabios” (que es lo mismo que “expertos” pero con el título de “Asesor de Obras” o “Alimentador de Palomas en los Parques”). Eran unos longevos señores que decidían qué programación poner para los adolescentes. 

Al final fue un estrepitoso fracaso cuando las noticias empezaron a darse en el Disney Channel y los menores se abonaron al Canal Plus Porno. Pero un fallo lo tiene cualquiera…

Como vemos, la elección o proceso de selección es sencillo y cualquiera puede probar a hacerlo en casa. Nivel de Dificultad: cero.

Por ejemplo: si se va a sacar una polémica ley sobre el aborto, es condición sine qua non, no nombrar a ninguna mujer en el Comité de Expertos. La ideología del Partido no permite mezclar peras con manzanas ni mujeres con alcornoques.

Otro ejemplo actual es la reforma de los Impuestos. Lo dice la palabra: “impuestos”…que es lo mismo que el clásico “por mis cojones” pero con rango de Real Decreto Ley. ¿Inspectores, Técnicos de Hacienda, Agentes de Hacienda, Auxiliares? No, coño, que esos saben. Y para presentar un informe de 444 páginas hechas con un corta y pega del “Libro de Hechizos de san Cipriano” no necesitamos gente que sepa. Ponemos a unos señores que sepan mucha teoría de esa. 

Todo el mundo sabe que “Fraude” es “amigo” en alemán, así que, que todo quede en casa.

La siguiente fase es la “elaboración”. Todos sabemos que el informe ya está redactado, así que hay que meter a todos los amigotes en un lugar donde se pueda macerar el engendro sin levantar sospechas: un hotel de cinco estrellas pagado por el contribuyente (también llamado “sujeto pasivo”, apochinador o muerdealmohadas), un Safari en Kenia con Juan Carlos o un viaje a Eurodisney con los hijos de Ana Mato. 

Esta fase ronda los tres o cuatro meses para darle credibilidad a la redacción. Cuatrocientas cuarenta y cuatro páginas entre ciento veinte días, nos da la friolera cifra de tres páginas por día. Paquirrín escribe más deprisa pero no ofrece demasiada credibilidad excepto para los directores de “La Razón” o el “ABC” que se creen todo lo que les echen.

Por último, hay que buscar la llamada “traca final”: la presentación del Informe. Aquí es muy importante que el ministro del ramo (que no “ramero”) ponga cara de despistado. Una mezcla de júbilo, sorpresa y orgullo (la misma que pondría un concursante de “Gran Hermano” después de acabar de leer la primera página de un libro para niños). 

La foto es la presentación del plato. Hay que adornarlo para que se pueda cobrar más por él: no es lo mismo poner unas lentejas con chorizo que hacer que un chorizo salga con lentejuelas. 

De esto saben mucho los ministros, no en vano, fueron cocineros antes que fraude. Y el que diga lo contrario está diciendo una mentira cocina.
Para la foto de la presentación se necesita: mucho alpiste, varios pájaros, algún fotógrafo de un periódico afín, media docena de gatitos (que hacen que las fotos sean aún más bonitas), un mural de fondo con un mensaje subliminal del estilo “Vaselinas el Puño” y un montón de revistas pornográficas encuadernadas en cuero para que parezca un Informe. La opción de llevarse unos pequeños golfillos tirando petardos por detrás del ministro depende de la atención que quiera darse al evento.

Bueno, eso es todo. Aunque no olvidéis que aparte de estos ingredientes, se necesita lo más importante: personas crédulas, ideas retorcidas y amigos con ganas de disfrutar de la vida. En resumen: mucha SOBREcualificación.

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Entrada destacada

“Palo y zanahoria” VS. “Sobreprotección infantil”

Volvamos unos cuantos años atrás viajando por el tiempo. Justo a la época en la que estás jugando con tus compañeros de quinto de Educaci...